TE QUIERO MAS QUE AYER (por Erik Navarrete)


Hoy desperté queriendote más que ayer; ésto no porque tú decidieras cambiar por mi lo que tanto me molesta de ti. Te quiero más que ayer porque la limeranza y el antaño anhelo renacen en mi corazón; cual tallo mutilado de la bugambilia que retoña en la negra tierra; mi amor por ti retoña en la negra tierra fértil de la ignorancia.

El efímero engaño del que soy presa renace con un ímpetu similar al de una rata envenenada y con la misma fuerza que tiene uno solo de tus cabellos de ébano. Te quiero más que ayer porque la químera de mil cabezas me condicionó a esta vil falacia, bombardeandome con imágenes de melosos corazones malva y obesos querubines hermafroditas: Parafernalia colmada de simbolismos que evocan un sentir para un exclusivo día y de paso a un fulano patrono legendario.

Te quiero más que ayer y voy a pretender comprar tu reciprócidad valiendome de unos embajadores infalibles: Ferrero Rocher, la tarjeta de la marca "Gusanito"; tal vez una Big Mac o un combo pareja de Cinemex. La misión exige un final feliz y por eso compré M-Force y Multi-0. Sin duda me vas a querer más que ayer pero sólo por un día, agradeceré al señor de la tienda de regalos y al de la farmacia por haberme resuelto el problemita pero sólo por un día.

Me dedicaré a ser el más romántico y el tamaño de mi amor será directamente proporcional al tamaño de los regalos que seguramente acabarán en la basura o en el retrete. Caminaré de la mano contigo y a lo largo de las indiferentes cuadras circundantes al "Mall", nos compararemos con las parejas que circulan en contraflujo y voy a deducir que aquel no quiere tanto a su pareja porque el globo que ella tiene es maś pequeño que el tuyo.

Me olvidaré de "nosotros" y mi atención se centrará en la Pull&Bear, American Eagle, Abercrombie, Hollister, Oggi, Doc. martens y demás serie de etiquetas que reafirman la plasticidad de muchas personas. Envidiaré voluptuosidades ajenas y me sentiré insatisfecho. Pero eso sí... voy a quererte más que ayer. Y el mañana no me importará... al fin y al cabo dentro de 364 dias volveré a quererte.

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