LA MARCHA DE LA DERROTA (por Erik Navarrete)

La Marcha de la Derrota (por Erik Navarrete)

Arthur schopenhauer dice en su celebre ensayo acerca del amor que cuando uno cree estar enamorado, no es otra cosa que el genio de la especie actuando sobre nuestros impulsos (ese "genio de la especie" se traduce el el instinto de conservacion de la especie como regidor de nuestros "sentimientos" a nivel individual pero tan constante e infalible sobre los seres vivos que adopta la caracteristica de ser generalizada) llevandonos a veces al grado de cometer estupideces que son susceptibles de ser escritas por su humilde servidor e incipiente Blogero Erik Monico y para pasar al ejemplo de lo antes dicho qusiera en primer lugar aludir al cliché televisivo que dice mas o menos así: "la siguiente historia esta basada en hechos reales, los nombres de los personajes han sido cambiados para proteger la identidad de las personas y caulquier parecido con la realidad es mera coincidencia"...

Mañana de viernes: alba magica empapada de esperanzas, de fiesta anticipada, sueños guajiros y por que no decirlo, de sueños humedos. Lamentablemente -o por fortuna- la mañana del dia de Venus tambien trae consigo el elemento pragmatico: la desilucion, el desengaño, el rechazo y esque hay cosas que no llegan cuando uno espera de mas y de eso a diario hay quien se entere de la mala forma, como le ocurrió a Alex Corona; un humilde pero dedicado empleado de una fabrica; padre de un hijo -en lo que cabe decirlo- bueno; esposo, amigo, amante, semiesposo o no se que cosa, de una malhumorada pero buena mujer, uno de tantos jovenes -y ya no tan jovenes- que se aventuran en las peligrosas aguas del concubinato a temprana edad para saciar una necesidad impropia de darle continuidad a su genetica, pero eso para nada es malo... No! La mala actitud de Alex radicaba en que dicha necesidad de continiudad le acosaba de manera desmedida y eso derivaba en la personalidad poetica, apasionada, cursi, sicaliptica y hasta polígama del buen Alex; era de esas victimas del "genio de la especie" que creía estar enamorado de una mujer si ésta le esbozaba una sonrisa o por el simple hecho de tener una "amistad" con X-Y susodicha; -aterrizando de la verborréa- aquel viernes como tantos otros, Alex era arrancado de los brasos de Morféo por el dolor en la espalda que le propinaba el viejo y mullido Restonic ya que, por alguna razón, preferia dormir solo, despues del ritual matutino de vaciar la vejiga, Alex se disponia a empezar bien el dia y para el no habia nada mejor que escuchando "Born to be alive" de Patrick Hernandez -mucha gente asegura que la primer melodia que escuchan despues de despertar, es aquella que marca de manera importante el resto de su día;bastaría con escuchar "the saber dance" de Katchaturian para tener los animos hasta arriba ó "Wandering stars" de Portishead para andar melancolico todo el día, je,je!!- mientras cantaba el estribillo de la alegre cancion, Alex, preparaba su haitual baño y pensaba "hoy si me le lanzo a la Perlita" y con meticuloso afan se arreglo para vivir un dia que prometía, segun el, un exito rotundo. Perlita, una hermosa niña ojos de onix, tierna y a la vez espinoza criatura, nacida bajo el influjo del arquero centauro hijo de la luna, dias atras habia creado, con sus ósculos sabor pastel, un espejismo colmado de pasion y sangre erguida en el cerebro del buen Alex, quien aquella mañana de viernes de asueto debido a su trabajo, y despues de inventarle un cuentote a su esposa Sandy, logro escapar de su ""hogar" con direccion hacia los brasos de su efimera "enamorada" y de ahí pues "lo que saliera y se diera" se decia Alex para sus adentros mientras le hacia la parada al sucio y estruendoso RTP. Perlita quien trabajabá como dependienta de una boutique de ropa tenia la habildad verbal de un politico y la mirada de un angel inocente, misma mirada que enloquecía a Alex, la cual le faciliitaba su trabajo; aquella mañana de viernes como tantas otras Perlita platicaba holgadamente con algun pretendiente tal vez ya que el nivel de confianza en dicha platica sobrepasaba a los simples guiños, y esque Perlita muy adelantada a su tiempo tenía una actitud bastante libertina "pero" tambien bastante honesta ya que a sus multiples conquistas siempre les decia, sin el minimo pudor, su forma de ser y el buen Alex no era la esepción -aqui cabe decir que entonces quien se hacia chaquetas mentales era el pobre Alex- total que dentro de la boutique estaba Perlita teniendo una platica acalorada y en ese momento de manera subita llegaba Alex para encontrarse con la escena que menos queria ver, tomando en cuenta que horas atras la mente de Alex estaba atiborrada de idealismos, romanticismo, una que otra posición del "kama-sutra" y su cuerpo ataviado con la ropa que consideró adecuada sin olvidar la estela aromatica que dejaba a su paso la versión de fraiché de green jeans de Versage que, segun él, era para el deleite de su enamorada...
-pfff! y todo esto para que? Alex se decia para sí mismo en un amargo reproche que se agravo al ver la mirada enojada y al tiempo sorprendida de Perlita, una mirada que contrastaba con aquella dulce mirada que tanto le gustaba contemlar pero que en ese infame viernes solo emanaba un dajo de desprecio...
-que haces aquí, preguntó Perlita con cierto desdén, -A si... Estoy bien y tu que tal, el sarcasmo se le daba bien a Alex y en esa ocasion tuvo que echar mano de esa cualidad -o defecto- para intentar asir un poco de dignidad, -no pues que no ves que estoy bastante bien, Perlita estaba comenzando a impacienrase, -haaaa!! Lo que pasa es que ya te puso nerviosa aca el muchachón, inesperadamente intervino el acompañante de Perlita mostrandose un tanto indiferente, -ja,ja,ja!! lo que pasa es que te pones nerviosa aqui viendo los musculos del chaval, musitó Alex nuevamente con sarcasmo tomando un poco la defensiva, -si heee! La verdad si!! Que acaso no lo ves??, y esas fueron las palabras que provocaron en Alex un sobresalto igaul al que experimenta cuando se está dormido y se siente como si se fuera uno a caer; quedando así la boutique en un incomodo y largo silencio que el mismo Alex se atrevió a romper tratando de dar muestras de dignidad y fortaleza...
-bueno pues yo solo vine a saludarte, pero veo que hago mal tercio asi que mejor luego te veo, dijo Alex mientras trataba de fijar la mirada al vacio o a cualquier otro lugar que no fuera hacia los tan preciados ojos de Onix pertenecientes a Perlita, -como quieras!, era evidente el desden que Perlita mostraba hacia Alex frente a su conquista en turno, por su parte Alex no tuvo mas remedio que emprender la marcha de la derrota; del mostrador de la boutique hacia la salida, no existían mas de tres metros, pero dadas las circunstancias esos tres metros para Alex se convertian en tres kilometros: tres kilometros de verguenza, de frustracion, de impotencia y desprecio; una vez fuera de la boutique, y con su falocentrista orgullo herido de muerte, Alex metío ambas manos a los bolsillos continuando su marcha de la derrota ; caminado lentamente y mirando hacia el suelo; caminado solo, ensimismado, ante la mirada indiferente de un mar de insencibles entes urbanos; a la distancia, tal vez proviniente de algun puesto de discos ú otro tipo de comercio, se escuchaba "sleepwalk" de Santo & Jhonny Farina cuyos acordes quedaban completamente ad-hoc con la silenciosa y dramatica situacion del pobre Alex. Despues de abordar camiones sin rumbo fijo y dos transbordes en el metro, Alex por fin observó su entorno sorprendido, como aquel que se libera de un estado catatonico provocado por un ataque epileptico, dandose cuenta que se encontraba sobre la avenida pricipal de la tal vez mas antigua zona roja del Distrito Federal: El Popular Mercado de la Merced; sería muy aventurado decir que Alex se encontraba en tan peculiar lugar solo por coincidencia, lo mas logico es que la imperiosa necesidad de Alex, de desahogar por la uretra la frustracion que le achacaba por el desaire de Perlita, lo condujo hasta las calles repletas de una abigarrada mezcla de formas, colores, aromas y sabores mismos que le dan al Popular mercado de la Merced un misticismo similar a un mercado de nueva Delhi; misticismo y viva personalid que se cuaja y fermenta atravez de años de tradición, años de historias, historias de indigenas, historias de conquistadores, historias de revoluciones, de felicidad, de vida, de muerte, de desgracia y en el grueso libro de historias del Tradicional Mercado de la Merced se escribía en tiempo real, la historia del buen Alex Corona; abriendose paso atropelladamente de entre la multitudinaria variedad de vendedores vociferantes, tradicionales mercaderes ávidos de colocar sus mercacias a toda costa; puesto tras puesto conformando el emarañado complejo: tomates de un lado, abarrotes por el otro; un enorme y obeso hombre de frente gracienta sirviendo humeantes tacos de carnitas a un nutrido grupo de marchantes, la célebre vitrina de grandes focos con chicharron de cerdo dentro; todos y todo licuandose en un caos de comercios; nave industrial con areas pestilentes en donde se borra la memoria olfativa como cuando se permanece por tiempo prolongado en un basurero y ya no es posible percibir hedor alguno; laberinto de tuneles comerciales donde la variedad de personas va desde el taquero, la señito de las cebollas, los arrogantes y bien bestidos padrotes y hasta el anciano vagabundo que se quedo dormido en la banqueta a causa de los efectos del alcohol del 96º ... ese es el Popular Mercado De La Merced lugar en donde Alex Corona bebía ya la tercer corona al interior de una loncheria y ya con los animos encendidos se dispuso a dirigirse hacia la avenida circunvalacion; ahi en donde el "amor" se vende, donde la lujuria sobra y donde Alex negocía con una bella mujer de "tacon dorado" el precio de la "tarifa del servicio"
-son $200 con todo y cuarto por 15 minutos, le decia la "servidora" con una mueca de astío ya que la gran mayoria de hombres que babeaban en esa zona solo eran simples mirones; Alex asintío con la cabeza y con una seguridad otorgada por las coronas, siguio de cerca a la dama hacia un callejón, al entrar al hotel en la recepción estaba un hombre con cara de pocos amigos, mismo que con voz aguardentosa le dijo a la joven de tacon dorado -ya sabes de a como, la joven le solicitó $50 a Alex y él accedio casi de manera automatica, tras recibir la llave del cuarto... -vente, es de este lado, le dijo la chica con acento monotono y Alex solo obedecio; al abrir la puerta del "cuarto" Alex tuvo frente de sí una sucia cobacha con olor a sudor y a pies de unos tres metros cuadrados misma donde solo habia un intento de cama sobre la cual descansaba una mugrienta colchoneta de lona azul y un "búro" que estaba coronado por un rollo de papel higienico; la chica de la vida facil le invitó a pasar pero antes le habia solicitado $150, mismos que Alex le dio a una voz; despues de ingresar al "cuarto" y tras cerrar la puerta, la bella joven de manera mecanica enrolló su tableada falda blanca a su cintura, libero su ropa interior solamente de la pierna izquierda y anudó su tanga rosa en la pierna derecha a la altura de la rodilla; y sin ningún preambulo la belleza semidesnuda se recostó en la mugrienta colchoneta y al tiempo adoptando la posicion ginecologica le invito a Alex a ecercarse; tal vez fue demasiado para Alex, pero éste con un tono titubeante le pidio a la joven primero pasar al baño, Alex sentía unas nauceas horribles: tal vez por la emoción, tal vez por la pestilente atmosfera del "cuarto" ó tal vez por culpa de la cervezas, el caso es que haciendo un esfuerzo titanico Alex logró contener el vomito, vació la vejiga y se enjuago la cara en el mohoso y diminuto lavabo; al salir del reducidisimo "baño" Alex se sorprendió al ver que la joven yacía recargada en el marco de la puerta de entrada con los brazos cruzados y con la falda colocada de manera normal...
-Bueno papacito pues para comenzar me tienes que dar $150, dijo la "dama" con un frío cinismo
-pp..pero si ya te pague al entrar al cuarto!, Alex no daba credito
-ni madres chiquito, ya estamos aquí y ahora me pagas ó llamo al que me cuida, y con un ademan amenazador la prostituta entreabrio la puerta
-no seas hija de la chingada si ya te pague no mames!!, definitivamente las coronas le habian dado valor a Alex
-Cheloooooooo!!!!!! Aqui en la 7 un culero no me quiere pagar, la sangre de Alex se helo y entonces sintío como los efectos de las coronas abandonaban su cuerpo; no pasaron ni dos minutos cuando llegó hasta el lugar un robusto gorila que vestía pantalon de gabardina caquí y camisa de seda azul desabotonada hasta la boca del estomago; entro al cuarto y señalando la cara de Alex respingó en tono amenazador...
-A ver culero ó pagas ó aquí te rajo tu madre
-Pues no mamen si yo ya le pague a la pinche rata ésta!!, Alex aun estaba envalentonado; en ese momento el gorilón, al parecer de pocas palabras, tomó violentamente a Alex de la ropa y lo arrojó contra la mugrienta colchoneta, la cual de cerca era aún mas asquerosa pues apestaba a patas y axilas rancias, Alex no tuvo mas remedio que aferrar sus brazos a su cabeza y colocar las rodillas en su pecho, adoptando así una posición fetal; el fornido gorilón nuevamente lo tomó de la ropa pero esta vez arrojandolo al suelo y Alex no pudo contener un gemido de terror y de pronto... Todo era silencio, todo era soledad, Alex efectivamente se encontraba tirado en el suelo, pero en el suelo de su casa, todo habia sido un sueño, una maldita pesadilla!! Alex tenia en sus manos la milagrosa oportunidad de no enfilarse en la marcha de la derrota, tenia la capacidad de decidir si aceptar ó no el rechazo de Perlita, de evitar conocer al gorilón y a su apoderada, pero sobre todo, sobre todo... Tenia la oportunidad de dirimirse y compartir ese milagro con su familia, tenia la dicha de volver a nacer aquella hermosa mañana de viernes, y cual dejavú Alex se levantó del piso, y despues del ritual matutino de vaciar la vejiga, se disponia a empezar bien el dia y para el no habia nada mejor que escuchando "Born to be alive" de Patrick Hernandez y mientras cantaba el estribillo de la alegre cancion, Alex, preparaba su haitual baño y pensaba "hoy si me le lanzo a la Perlita"... Alguna vez José Ortega y Gasset dijo: "El enamoramiento es un estado de miseria mental en que la vida de nuestra conciencia se estrecha, empobrece y paraliza."

FIN?...

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